Lavagna suspendió su campaña y pidió al resto de los candidatos hacer lo mismo

Propuso una "mesa de consenso". Entre quienes acompañaron al candidato en su anuncio figura el aspirante a la gobernación bonaerense Eduardo "Bali" Bucca. El ex ministro de Economía culpó a la crisis generada tras las PASO a la "extrema polarización".

15 de Agosto

El candidato presidencial Roberto Lavagna suspendió este jueves su campaña electoral hasta que el país recupera "la estabilidad", al tiempo que invitó al resto de los postulantes a hacer lo mismo. Además, propuso una "mesa de consenso" y acelerar la renegociación de los pagos al FMI.

Lavagna anunció su decisión desde sus oficinas del centro porteño, acompañado de su compañero de fórmula, el gobernador salteño Juan Manuel Urtubey, el candidato a gobernador bonaerense, Eduardo "Bali" Bucca y los postulantes a diputados Graciela Camaño y Alejandro "Topo" Rodríguez,  entre  otros.

Lavagna, que obtuvo más de 2 millones de votos en las PASO del domingo, en las que resultó el tercer candidato más votado a presidente, instó al resto de los postulantes a "cancelar las acciones electoralistas por varias semanas hasta que recuperemos la serenidad y la estabilidad que necesitamos".

Asimismo, exhortó al gobierno a que "plantee de inmediato ante el FMI la necesidad de renegociar el crédito stand by vigente, cuyos condicionantes y perfil de vencimientos son imposibles de cumplir sin imponerle a los argentinos muchos años más de ajuste y sufrimientos".

Por ello, propuso a la dirigencia política que "alcancemos acuerdos básicos sobre el cumplimiento de todos los compromisos asumidos por la Nación" y la creación de un +ámbito, que llamó "mesa de consenso" para trabajarlos.

En ese marco, pidió que "el Poder Ejecutivo Nacional convoque, con urgencia, a gobernadores, intendentes y organizaciones de la sociedad civil, con el propósito de unificar el diagnóstico de necesidades y adoptar las medidas administrativas que agilicen las compras y contrataciones y coordinar las acciones de distribución territorial".

El ex ministro de Economía culpó a la crisis generada tras las PASO a la "extrema polarización que construyeron, a lo largo de ocho años de estancamiento, los dos últimos gobiernos, siguiendo una estrategia de amigo-enemigo que instaló el encono entre los argentinos".

"Las tensiones entre ambos extremos -macrismo y kirchnerismo- y la orientación de sus políticas, de signo opuesto, pero igualmente equivocadas, llevaron a que el derrumbe de la polarización fuera acompañado de una crisis", agregó Lavagna. 

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